Ortodoncia en Niños
Información sobre tratamientos de ortodoncia para niños menores de 12 años.
Algunos niños se pueden beneficiar de una evaluación de ortodoncia desde la edad de 5 o 6 años. Aunque tratamientos a esta edad es poco frecuente, algunos tratamientos preventivos pueden ser indicados.
Para la edad de 7 años la mayoría de los niños tienen una mezcla de dientes de leche (primarios) y dientes de adultos (permanente). Algunos problemas comunes de ortodoncia en niños se pueden ocasionar por la genética, esto significa que pueden ser problemas hereditarios. Los niños pueden tener dientes encimados, espacio entre los dientes, dientes salidos, falta de dientes y en ocasiones problemas de desarrollo de maxilares.
Otras maloclusiones (literalmente, “mala mordida”) son adquiridas por malos hábitos, se desarrollan a través del tiempo.
Pueden ser causados por chuparse el pulgar, respirar por la boca, enfermedades dentales, mala higiene bucal, la temprana o tardía pérdida de los dientes de leche, accidentes o mala nutrición. A veces una maloclusion heredada puede ser complicada por un problema adquirido. Sin importar la causa, el ortodoncista puede tratar la mayoría de las condiciones exitosamente.
Los ortodoncistas están entrenados a detectar problemas sutiles con el desarrollo de los maxilares y dientes emergentes cuando algunos dientes de leche siguen presentes. La ventaja para pacientes de la detección temprana de problemas de ortodoncia es que algunos problemas son más fáciles de corregir si son detectados y tratados en una etapa temprana. Por esto se recomienda que se evalúen los niños a más tardar a los 7 años.
En algunos casos tu ortodoncista puede encontrar un problema que se puede beneficiar de un tratamiento temprano. El tratamiento puede prevenir problemas más serios y hacer que un tratamiento posterior sea más corto y menos complicado. Para los pacientes que tengan indicaciones claras de una intervención temprana de ortodoncia, el tratamiento preventivo ofrece la oportunidad de:
- Dirigir el desarrollo de la mandíbula
- Reducir el riesgo de trauma a los dientes salidos
- Corregir hábitos orales dañinos
- Mejorar apariencia y autoestima
- Dirigir los dientes permanentes a una mejor posición
- Mejorar la forma en que los labios se encuentran
No es siempre fácil para los padres saber si sus hijos tienen problemas de ortodoncia. Aquí están algunas señales o hábitos que pueden indicar la necesidad para una evaluación de ortodoncia.
- Temprana o tardía pérdida de dientes de leche
- Dificultad para morder o tragar
- Respiración por la boca
- Chuparse el pulgar
- Dientes encimados
- Dientes que se encuentran anormalmente
Si cualquiera de estos problemas es notado por los padres es aconsejable que consulten a un ortodoncista.